Salt Lake City—Los datos nacionales publicados la semana pasada por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) muestran que las tasas de vapeo de los estudiantes de secundaria y preparatoria disminuyeron del 14,1% al 10% entre 2022 y 2023. Las tasas de vapeo entre los jóvenes de Utah también han disminuido en los últimos años, del 12,4% al 7,4% entre 2019 y 2023, según la encuesta de Salud y Prevención de Riesgos de los Estudiantes de Utah (SHARP, por sus siglas en inglés). Sin embargo, a pesar de este progreso, los jóvenes siguen siendo una población objetivo de las tácticas de mercadeo de la industria tabacalera.
“Nuestro estado ha hecho grandes progresos para limitar el acceso de los jóvenes a los productos de vapeo. Sin embargo, el vapeo sigue siendo una preocupación en nuestras escuelas y familias”, dijo Braden Ainsworth, del Programa de Prevención y Control del Tabaco del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Utah (DHHS).
La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA) emitió recientemente cartas de advertencia a 15 minoristas en línea por unos nuevos dispositivos atractivos para los jóvenes que se parecen a material escolar, personajes de televisión, juguetes y dulces. Estos nuevos diseños de dispositivos de vapeo dificultan aún más la identificación de tales productos por parte de los padres y las escuelas. Se alienta a los padres a hablar abiertamente con sus hijos sobre los peligros del vapeo.
“Los padres y los administradores de las escuelas pueden verse tentados a adoptar medidas de vigilancia y castigo, como la instalación de detectores de vapeo o suspender las actividades extraescolares, cuando descubren a niños vapeando. Las investigaciones demuestran que estas medidas -sin apoyo terapéutico- pueden generar desconfianza en las relaciones, perjudicar el rendimiento académico de los alumnos y hacer que los jóvenes consuman más. En cambio, ayudar a los jóvenes a ponerse en tratamiento ha demostrado ser lo más eficaz para tratar las adicciones y dependencias“, afirma Ainsworth.
Los padres y las escuelas disponen de una serie de recursos gratuitos para hacer frente a la prevención del vapeo y la adicción a la nicotina. Algunos de ellos son:
- My Life My Quit: Una línea de ayuda para dejar de fumar y la adicción a la nicotina para adolescentes basada en la evidencia. Limitación de responsabilidad: Se requiere el consentimiento de los padres para que los jóvenes se inscriban.
- Guía de conversación para padres: Desarrollada con un terapeuta familiar, esta guía ofrece consejos y datos sobre la salud para ayudar a los padres a hablar con sus hijos sobre el vapeo.
- Empower Vape-Free Youth: Esta nueva campaña de los CDC contiene materiales y vídeos para que las escuelas eduquen a los jóvenes sobre el vapeo.
- Prevención y educación sobre el vapeo: Una campaña de la FDA para padres, colegios y estudiantes con recursos sobre los peligros de la nicotina.
Para saber más sobre cómo proteger a los jóvenes de los peligros del vapeo, visite seethroughthevape.org o veaatravesdelvapeo.org.